Emilia y Conrado. Conrado y Emilia. Dos personas que guardan unas mismas características: Humanidad y empatía. Una característica imprescindible para poder ayudar a personas vulnerables que llegan a nuestro país sin saber el idioma, sin ningún tipo de ayuda y sin vínculos que les acojan. Personas que en un momento de su vida decidieron aportar su granito de arena y desarrollar su labor voluntaria junto a Cruz Roja. En esta entrevista nos cuentan dicha labor, sus motivaciones, y sus inquietudes dentro del proyecto ‘Acompaña’ del área de Inclusión Social.

¿Cómo te iniciaste en tu voluntariado?

Conrado – Siempre he tenido claro que quería ser voluntario en cuanto me jubilase. Y actualmente, en mi opinión, uno de los sectores más necesitados de ayuda es el de estos jóvenes que han cruzado desiertos y océanos, han dejado sus familias y se han enfrentado ellos solos al mundo, sin casi adolescencia y sin que nadie les de las buenas noches con un poco de cariño. Y Cruz Roja se preocupa de ellos.

Emilia – A lo largo de mi vida he sido voluntaria presencial y no presencial en diversas organizaciones. En general, siempre he estado sensible a la injusticia social y las situaciones de vulnerabilidad y exclusión en los últimos años especialmente con la problemática de la inmigración, particularmente juvenil.

¿Cuál es tu labor en el proyecto ‘Acompaña’?

Conrado – Dos días a la semana hago mi voluntariado en la calle Pozas. Al principio daba clases de español e informática, enseñándoles, por ejemplo, a hacer un currículum. Ahora estoy más con los mayores de edad que siguen en el proyecto y les ayudamos a tramitar el derecho a la asistencia sanitaria o a buscar vivienda.

Emilia – Mi labor, dentro de la sede de la calle Pozas, se desarrolla como mentora de algunos chicos y chicas en su fase de paso, desde la minoría de edad a su autonomía habitacional, laboral, educativa, etc. Soy su referente personal y su apoyo para cualquier problema o duda. Especialmente, para que no se sientan solos y sepan que pueden contar conmigo en todo momento.

¿Cómo enfrentas tu tarea diaria con estos menores?

Conrado – Nuestra tarea es escucharlos y acompañarlos, pero es muy difícil que se abran, la vida les ha enseñado a no mostrar emociones.

Emilia – Es una tarea delicada, me enfrento a ella con la máxima empatía, poniéndome en su lugar en todos los sentidos. Intento aportar apoyo, comprensión por sus exigencias y necesidades a la vez que respeto por sus orígenes, cultura e individualidad. La escucha y el acercamiento con afecto son esenciales para entender sus necesidades como jóvenes que viven en un medio sociocultural desconocido y en muchas ocasiones hostil.

¿Cuál es el perfil de los menores que están en el programa Acompaña?

Conrado y Emilia – En la inmensa mayoría son jóvenes migrantes entre 16 y 23 años de diversas nacionalidades, con un importante porcentaje de origen marroquí y subsahariana.

Conrado – Al llegar no conocen nuestra cultura ni nuestra lengua, por eso nuestra labor empieza aquí. Por otro lado, también creo que tienen carencias de afectividad y necesitan personas que los quieran, con la que puedan tener confianza. Tienen proyección para la inserción laboral a corto y medio plazo, además de mucha motivación.

Emilia – Se deben enfrentar a encontrar su lugar y construir su vida en esta sociedad ajena a su historia personal. Las dificultades son varias, empezando por necesitar aprender castellano, entender y enfrentarse con la gestión administrativa para adquirir sus derechos, el problema habitacional, formativo y laboral… En la actualidad, la dificultad más acuciante suele ser el habitacional.

¿Y qué fórmulas de ayuda ofrecéis para estos jóvenes?  ¿Qué tipo de actividades existen actividades dirigidas a favorecer la integración de estas personas en nuestra sociedad?

Conrado – En el proyecto se realiza intervención individual y grupal. De forma individual, con acompañamientos, mentorías, asesoramiento jurídico, psicológico y con la gestión de documentos. De forma grupal, se hacen talleres de español, de desarrollo personal, de gestión de la vida cotidiana, como aprender a cocinar, a poner una lavadora, ir a la compra o a pedir una cita médica por teléfono. También, el proyecto tiene actividades de ocio y se practican deportes.

Emilia – En todos los aspectos anteriormente mencionados, se ofrece apoyo y ayuda concreta para resolverlos conjuntamente. Inicial y puntualmente, por ejemplo, puede ser un apoyo económico para dar el primer impulso a abrirse su camino de vida aquí. Siempre se hace asesoramiento y seguimiento individualizado según necesidad (ayuda en gestiones administrativas, médicas, etc.). También, existen actividades y talleres semanalmente con continuidad a lo largo de todo el año con el fin de socializar y de crear integración. Desde clases de idioma, a talleres de formación a la ciudadanía, talleres prácticos, actividades en museos y de entretenimiento, entrenamientos deportivos…

¿Notáis qué vuestra ayuda les sirve?

Conrado – En el día a día no se percibe el fruto del trabajo, pero cuando lo analizas fríamente, ves que a poco que se ayude a estos jóvenes significará mucho en su edad adulta. Intentamos sembrar la semilla del cariño en un mundo que se les presenta ajeno.

Emilia – En general es una carrera de fondo, necesita tiempo, dedicación y mucha energía, pero en el camino, se van viendo los resultados, grandes y pequeños, lo cual es fuente de gran satisfacción; aunque no siempre son recorridos lineales, ni fáciles. Se me ha quedado clavada en la memoria la sonrisa e inmensa felicidad de dos chicos cuando pudieron salir del hostal donde estaban hospedados para poder ir a vivir a un piso. Su primer alojamiento independiente.

Describe tu experiencia en una palabra.

Conrado – Solidaridad.

Emilia – En una palabra, difícil. En una frase quizás: ¡No estás solo/a aquí! ¡Cuentas conmigo!

 

Si te ha gustado esta noticia y quieres desarrollar tu labor como agente de cambio en la sociedad, puedes poner tu granito de arena como persona voluntaria. ¡Encuentra aquí tu voluntariado!

Si te sientes identificado/a con nuestra entidad y quieres colaborar para que podamos seguir desarrollando nuestra actividad, puedes hacerte socio/a de Cruz Roja. ¡Encuentra aquí en qué proyectos puedes aportar tu granito de arena!

DEJA UNA RESPUESTA

Deja un comentario!
Introduce tu nombre

PROTECCION DE DATOS PERSONALES: En cumplimiento de la normativa vigente en Protección de Datos, en particular, el Reglamento General de Protección de Datos (Reglamento UE 2016/679), Cruz Roja Española le informa que todos los datos de carácter personal facilitados en el presente formulario, así como cualquier otra información y/o documentación que pudiera hacernos llegar, serán tratados con la finalidad de atender la consulta realizada, remitirle la información solicitada  y llevar un registro estadístico de consultas.

Usted puede ejercer, en cualquier momento, los derechos de acceso rectificación, cancelación, oposición así como los contenidos en el Capítulo III del Reglamento (UE) 2016/679) dirigiendo un escrito a Cruz Roja Española, (Att/ Delegado de Protección de Datos), Avenida Reina Victoria, 26-28, 28003 Madrid, o a la dirección de correo dpo@cruzroja.es, previa acreditación de su identidad.

 

Para más información, consulte nuestra política de privacidad.