Mina Belkhoch es mediadora social dentro del hostal Welcome para personas refugiadas. Hija de diplomáticos, Mina ha vivido y ha viajado toda su vida alrededor del mundo, lo que le ha llevado a trabajar en otras ONGs y en otras Cruces Rojas. Tras dos años en Cruz Roja en la Comunidad de Madrid, Mina acaba de firmar su contrato indefinido y nos parecía un buen momento para sentarnos con ella y entrevistarla.
¿Quién es Mina y cómo llegas a Cruz Roja?
Mis padres, uno de origen argelino y otra de origen francesa, diplomáticos de profesión, me han hecho viajar toda mi vida alrededor del mundo. Cada cuatro años he vivido en un país diferente y eso me ha posibilitado dar la vuelta al mundo, pero al final he decidido estabilizarme en España.
Por motivos familiares me fui a trabajar a Cruz Roja en Bélgica y tras dos años, me volví a Madrid. Vi una oferta de empleo en Cruz Roja de mediadora social intercultural en el Hostal Welcome para Refugiados y aquí estoy.
¿Qué diferencias existen de trabajar en la Cruz Roja Belga y la Española?
He de decir que no solo he trabajado en la Cruz Roja de Bélgica sino también, en la Media Luna Roja, en Kuwait. Allí trabajaba con mujeres, apoyándolas y ayudándolas en su modo de vida sin tratar de cambiar su mentalidad.
En Bélgica, yo trabajaba en una ciudad que era frontera entre Luxemburgo, Francia y Alemania. Era un paso fronterizo y no tiene nada que ver con trabajar en Bruselas o en Lieja. Yo trabajaba en la acogida de emergencia y, en este sentido, si hay diferencia con el trabajo que realizo ahora mismo.
Ahora bien, en cuanto a principios, valores, etc. son los mismos y no hay mucha diferencia en las interpretaciones y eso, nos une.
«He trabajado en muchos sitios, he vivido en medio mundo y yo voy a seguir apostando por seguir trabajando en Cruz Roja y dar lo mejor de mi.»
Cuéntanos cuál es tu puesto de trabajo, y qué labor desempeñáis en el Hostal Welcome
El Hostal Welcome es un recurso de primera acogida. A día de hoy estamos 4 mediadores sociales y 4 trabajadores sociales para ayudar a personas refugiadas que vienen de muchas partes del mundo (Venezuela, Jamaica, Haití, Líbano, etc).
Trabajamos por parejas para apoyar y ayudar a un número concreto de participantes. Los mediadores sociales, cuando llega el participante, hacemos la entrevista de bienvenida. Se le entrega un kit de higiene, le ponemos en contacto con los servicios médicos si fuera necesario, les ayudamos a solucionar los conflictos que puedan tener, les damos apoyo en asesoría jurídica, traducción e interpretación, ponemos a disposición psicólogos si fuera necesario, etc. En definitiva, un itinerario integral de intervención social.
Al ser una primera acogida, vamos haciendo un seguimiento diario de cada participante con el objetivo de trabajar su estabilidad y que se encuentren lo mejor posible.
¿Qué es lo más bonito de tu trabajo? ¿Y lo más difícil?
Lo más bonito es la solidez y el espíritu trabajador del equipo. Entre todas y todos formamos un gran equipo. Cada uno tiene su punto fuerte (idiomas, informática, etc,). y entre todos lo ponemos en valor.
Lo más duro es cuando un participante viene llorando, desesperado y tu te ves allí, delante de la persona. Es cierto que tenemos psicólogos pero es duro enfrentarse a estas situaciones.
¿Qué has aprendido en Cruz Roja Comunidad de Madrid?
Ser fiel a los valores que me han transmitido y trabajar bajo ellos.
Saber gestionar situaciones cuando se vuelven complicadas y ahí, los valores de Cruz Roja marcan mucho.
¿Cuál es tu huella personal en el trabajo?
La humildad y la empatía. Dar todo lo que puedo de mi para ponerme en el papel del otro con el objetivo de ayudar a la gente. Cuando veo que la persona sale mejor de lo que ha entrado, para mí es una auténtica alegría.
Llevas dos años en Cruz Roja y acabas de firmar un contrato indefinido. ¿Cómo te has sentido?
Me he sentido muy agradecida y contenta. Tengo mucha confianza en esta entidad que cumple con todos sus compromisos.
¿Qué destacas de Cruz Roja como empresa empleadora?
Cruz Roja Española creo que es mucho más humana y cercana que otras entidades. Yo estoy muy contenta y considero que estoy en mi ámbito, dentro del Hostal Welcome.
¡Recomendaría a todo el mundo trabajar en Cruz Roja!
¿Qué significa para ti ‘ser de Cruz Roja’?
Estoy muy orgullosa y satisfecha de pertenecer a Cruz Roja. He trabajado en otras ONGs alrededor del mundo pero es que Cruz Roja es especial.
Cada entidad social tiene sus particularidades pero Cruz Roja tiene algo especial. La propia marca de Cruz Roja es una marca muy reconocida por su trabajo. Y eso, no lo tienen todas.
¿Cómo te ves en unos años?
He trabajado en muchos sitios, he vivido en medio mundo y yo voy a seguir apostando por seguir trabajando en Cruz Roja y dar lo mejor de mi.
Por haber viajado tanto, haber conocido otras culturas y países, ¿Cómo le explicarías a alguien que no pertenece a Cruz Roja, qué es esto?
Cruz Roja es un espacio que trata de cambiar el mundo. Que intenta restaurar la dignidad humana, que otras personas destrozan. Es una parada donde las personas vienen, descansan y se les da un chute de energía para darles otra oportunidad y salir adelante.
