El histórico servicio de Teleasistencia de Cruz Roja en la Comunidad de Madrid no ha dejado de alcanzar hitos en los últimos años. La Organización fue pionera en nuestro país en la utilización de este servicio hace más de treinta años, y desde entonces no ha parado de evolucionar y trabajar para estar más cerca de las personas.
Este proyecto resulta fundamental para fomentar la autonomía de las personas mayores, así como consolidar su independencia y seguridad, tanto fuera como dentro del domicilio. Además, aporta a sus familiares y personas cercanas tranquilidad y confianza, sabiendo que sus seres queridos están atendidos 24h al día los 365 días del año.
Tras años trabajando en el ámbito de la teleasistencia, Cruz Roja ha conseguido dar un impulso definitivo al proyecto y hacer crecer los terminales hasta los 12.398 usuarios atendidos, acumulando además 10.205 terminales de teleasistencia activos en el primer trimestre de 2021.
En los últimos años, la Organización ha venido ofreciendo una asistencia de calidad a las personas más vulnerables, que se ha apoyado en la innovación tecnológica constante y el desarrollo de itinerarios y respuestas personalizadas, acercándose lo máximo posible a una cobertura individualizada de las necesidades de los usuarios. Los resultados favorables obtenidos en el primer trimestre de 2021 consolidan esta tendencia de evolución constante del proyecto, que ha sabido adaptarse a las circunstancias extraordinarias derivadas de la emergencia sanitaria para afianzar su actividad.
La teleasistencia móvil: un pilar fundamental
La teleasistencia domiciliaria, no obstante, no es el único servicio que ofrece el proyecto de Teleasistencia. La teleasistencia móvil es su segundo pilar, que ha experimentado, además, un crecimiento exponencial en los últimos años. Esto ha posibilitado que Cruz Roja se adapte a las nuevas necesidades de una población cada vez más tecnológica y activa, que demanda soluciones también para fuera de sus hogares, que puedan transportarse a cualquier lugar. “Por eso Cruz Roja ha apostado decididamente por la innovación, para ofrecer el servicio en el propio móvil de la persona o, por ejemplo, a través de un smartwatch”, señala Tania Oriol, Coordinadora de Proyectos de Teleasistencia de Cruz Roja en la Comunidad de Madrid.
En tan solo cuatro años se ha triplicado el número de terminales en este ámbito en la Comunidad de Madrid, pasando de 390 asistidos en 2017 a 1.462 en 2021. La teleasistencia domiciliaria ha evolucionado para ofrecer terminales que pueden llevarse a cualquier domicilio o residencia dentro del territorio nacional. Además, se han lanzado dispositivos que permiten adelantarse proactivamente a situaciones de riesgo y activar alarmas de forma automática, sin necesidad de pulsar un botón (con tecnología de detectores de caída, de presencia y movilidad, de apertura de puertas u otros elementos del hogar, etc.).
Esta tecnología permite incluso que Cruz Roja realice un seguimiento de la salud desde el propio domicilio, con un registro informático y unas alarmas autónomas en base a esos parámetros. “Por ejemplo, generando una alerta cuando la tensión no corresponde con los valores de la persona, para ver qué ocurre y prevenir futuros problemas de salud”, concluye Tania Oriol.
Una innovación constante en lo tecnológico y lo humano
La Teleasistencia puede prevenir situaciones de riesgo para todo tipo de usuarios, y su objetivo es que la persona se sienta segura tanto dentro como fuera de casa, con cualquier problema que pueda tener. Uno de los objetivos actuales del proyecto es desmontar la creencia de que se enfoca únicamente a personas mayores.
Este servicio también se ofrece y puede resultar de gran ayuda a otros perfiles y necesidades: tales como mujeres con embarazos de riesgo, personas con discapacidad, personas con enfermedades crónicas, deterioro cognitivo, deportistas, en situación de soledad no deseada, etc.
En la actualidad, el reto continúa siendo situarse cada vez más cerca de las personas y seguir creciendo para asistir al mayor número de usuarios, detectando sus necesidades y ofreciendo respuestas adaptadas, con la mayor precisión posible.
El proyecto experimenta una modernización constante gracias al trabajo y al esfuerzo del equipo, que además ofrece respuestas complementarias como visitas, talleres, acompañamiento a gestiones, acciones para paliar la soledad, etc. Así, a día de hoy se ofrecen diversas opciones de teleasistencia avanzada como Teleasistencia Móvil, el programa LoPe (localizador de personas) y Cuídate+, más allá del tradicional servicio de teleasistencia domiciliaria.
Teleasistencia en el Plan RESPONDE
Como parte del Plan RESPONDE a causa de la situación de emergencia sanitaria, que supone la mayor movilización de recursos de Cruz Roja hasta la fecha, el servicio de Teleasistencia ha conseguido reforzar sus respuestas pese a las nuevas dificultades encontradas.
La mayor parte de las personas mayores (principales beneficiarios del servicio) ha experimentado esta situación con especial crudeza, causando en ellos un fuerte impacto de soledad no deseada. En situación de aislamiento y vulnerabilidad de sus seres queridos, los familiares experimentan una tranquilidad adicional si saben que el equipo de Cruz Roja puede acceder al domicilio en caso de que algo ocurra, o monitorizar su situación con el colgante o la pulsera (los métodos de teleasistencia tradicional).
María Encinar, técnica autónoma del Proyecto de Teleasistencia, señalaba la importancia en este proceso de los equipos de instalación, que “por prevención, han llegado incluso a realizar esta labor de implantación del equipo desde fuera del domicilio, con un dispositivo que se programa con anterioridad y comienza a funcionar automáticamente al conectarse a la red eléctrica; o con la instalación de aplicaciones en el móvil sin entrar al domicilio”.
Con este refuerzo de las actividades específicas, se ha logrado blindar la atención a las personas más vulnerables durante los meses más duros de la pandemia. El proyecto de Teleasistencia continuará en esta dirección en el futuro, no dejando de evolucionar y adaptarse a las circunstancias para conseguir estar cada vez más cerca de las personas, con la eficiencia y humanidad que lo caracterizan.