Durante este año y poco, hemos podido ver y escuchar muchos muchos testimonios de personas atendidas por la organización durante la pandemia pero nunca antes nos habíamos fijado en aquellos que vivieron un doble confinamiento durante esta crisis, los internos en el Centro Penitenciario de Aranjuez.
Las personas privadas de libertad sumaron, a su ya aislamiento social, la imposibilidad de tener comunicaciones, permisos y noticias de sus familiares durante muchos meses. Además, vieron interrumpidas prácticamente todas sus actividades en el centro penitenciario, entre las que se encontraban los talleres llevados a cabo por el equipo de Cruz Roja Aranjuez en Madrid VI.
Fue cuando el equipo de voluntariado que venía interviniendo en el Centro Penitenciario tuvo la iniciativa de escribir cartas a todos los participantes de los talleres para trasladares el apoyo en aquellos momentos tan duros para todos y todas. Ha sido ahora, al reanudar la presencia de Cruz Roja en el centro, cuando el equipo de Aranjuez ha recibido las respuestas de los participantes a las cartas enviadas. En este artículo nuestros compañeros y compañeras de Aranjuez han querido compartir alguna de estas cartas que tanto les ha emocionado.
Emociona comprobar el sentido de la actividad voluntaria en este entorno, sirviendo de ventilación y apoyo emocional. Emociona la percepción que los internos han tenido de la intervención de Cruz Roja en el exterior a través del Plan RESPONDE.
La empatía, el apoyo, el agradecimiento, la solidaridad y la generosidad de compartir sus emociones con el equipo de Cruz Roja dan sentido a nuestra intervención y refuerzan la vigencia de los valores de nuestra organización, estando al lado de las personas vulnerables, sin excepción.