Raiza Zerpa es voluntaria en los proyectos de Ahorro Energético e Integración de Inmigrantes en la asamblea de Cuenca del Manzanares. Además, Raiza es una de las más de 100 millones de personas en todo el mundo (datos de finales de 2022) que se vieron obligadas a desplazarse como consecuencia de persecuciones, conflictos, violencia, violaciones de los derechos humanos o eventos que alteraron gravemente el orden público.
Hoy se celebra el Día Mundial de las Personas Refugiadas y hemos querido hablar con ella para que nos cuente en primera persona cómo es la labor de Cruz Roja con las personas refugiadas y cómo es la situación actual de estas personas en España.
¿Siempre te has interesado por el voluntariado?
Sí, esta labor ya la hacía en otros países y ahora en España porque, como seres humanos, debemos ser empáticos. Siempre va a existir alguien que necesite de nuestra ayuda.
¿Desde cuándo eres voluntaria de Cruz Roja? ¿Por qué escogiste Cruz Roja y no otra entidad?
Llevo siendo voluntaria de Cruz Roja Española desde el mes de marzo y escogí esta entidad por ser una institución con una excelente trayectoria. Su presencia está a nivel mundial y sus principios de neutralidad, protección hacia la vida y la búsqueda de paz son, sin lugar a dudas, los criterios que considero más importantes como voluntaria. En Cruz Roja respetamos al ser humano sin distinción de raza, credo o religión. Para nosotros la cooperación es un principio inquebrantable.
¿Qué labores realizas como voluntaria?
Actualmente soy voluntaria en Ahorro Energético e Integración de Inmigrantes. Asistimos a las personas usuarias en el consumo de la energía eléctrica y asesoramos para lograr disminuir el consumo. Además, soy monitora del taller de aspectos jurídicos básicos.
«Para mí la solidaridad no tiene horarios, querer es poder y siempre consigo tiempo para dedicarlo al voluntariado»
¿Qué te motiva a realizar talleres para personas inmigrantes?
Principalmente, por el hecho de ser migrantes. Es un proceso muy difícil el tener que estar lejos de tu hogar y emprender un nuevo camino hacia lo desconocido. Como voluntaria, quiero estar para quien me necesite y poder ayudar con nuestros talleres, tener la satisfacción de solidaridad con los demás es gratificante.
¿Crees que es un recurso que las personas refugiadas necesitan en la asamblea de Cuenca del Manzanares?
Por supuesto, la asistencia a personas refugiadas debe existir en todo momento. Es importante destacar que no elegimos ser refugiados/migrantes, solo estamos huyendo de una situación ajena a nuestra voluntad.
¿Crees que tenemos en nuestro país suficiente sensibilidad con este tema?
A pesar de que España es un país que ha acogido a muchos migrantes, considero que hace falta más sensibilidad, más programas donde podamos asistir a los migrantes y lograr su inserción en la sociedad. Existen muchos profesionales y estoy muy segura que aportarían al país.
«En Cruz Roja somos como un engranaje donde todos vamos en la misma dirección: el respeto por el ser humano»
¿Cómo compatibilizas la vida laboral y el voluntariado?
Para mí la solidaridad no tiene horarios, querer es poder y siempre consigo tiempo para dedicarlo al voluntariado.
¿Qué crees que aportas como persona voluntaria?
Creo que en Cruz Roja todos somos esenciales, somos como un engranaje dónde todos vamos en la misma dirección: el respeto por el ser humano. Todos tenemos un aporte importante para la sociedad y el mundo.
Nota: Integración de Inmigrantes es un proyecto cofinanciado por la Comunidad de Madrid a través de los fondos provenientes de la asignación tributaria del 0,7% del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
En esta noticia hablamos del Objetivo de Desarrollo Sostenible 10 como parte de nuestro compromiso para potenciar la consecución de la Agenda 2030. Puedes obtener más información de los ODS en el siguiente enlace.
