Los conflictos armados afectan a millones de seres humanos año tras año. Los programas de Agua y Hábitat del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), y los proyectos de agua de la Federación Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, y Cruz Roja Española tienen la finalidad de asegurar el acceso al agua en zonas de conflicto o ciudades en los que los sistemas de agua y saneamiento son inexistentes o insuficientes por la situación del país, y establecer o preservar un medio ambiente sostenible. Su objetivo fundamental es contribuir a la reducción de la mortalidad y el sufrimiento provocados por el daño o la destrucción de los hábitats y los sistemas de abastecimiento de agua.
En situaciones como las que vive Ucrania desde hace 8 años, con frecuencia, las poblaciones carecen de protección, asistencia médica y acceso al agua potable por el daño y la destrucción de las fuentes de suministro. Por ello, al trauma de la guerra se suman los riesgos sanitarios.
En situaciones de crisis agudas, cuando se interrumpe el suministro de agua (a veces deliberadamente) y se pone en riesgo la vida de las personas, que deben buscar fuentes alternativas de agua en entornos hostiles.
La preservación de los sistemas de abastecimiento de agua y los servicios de saneamiento en las zonas de conflicto se cuenta entre las prioridades del CICR y la Cruz Roja Internacional
Durante los conflictos armados y los desastres naturales suele haber necesidades urgentes de agua, a veces como consecuencia de desplazamientos masivos de población. Actuar rápidamente es prioritario, en particular para asegurar el acceso al agua en cantidad y calidad suficientes. En situaciones de emergencia, y como último recurso, el agua se transporta hacia el lugar donde se la requiere hasta que se encuentre una solución permanente. En la mayoría de los casos, proporcionar instalaciones de almacenamiento para la comunidad y los hogares es clave para la implementación de soluciones definitivas pues, entre otras cuestiones, reduce el riesgo de contraer enfermedades.
Centenares de miles de personas que viven cerca de la línea de contacto han sufrido durante los últimos años interrupciones en el acceso a alimentos, agua y electricidad. Esta ha sido su realidad diaria durante casi ocho años. Las hostilidades en el este de Ucrania han dejado regularmente a ciudades, pueblos y comunidades rurales a ambos lados de la línea de contacto sin agua, gas o electricidad esenciales durante días o semanas.
Tras la escalada en el conflicto, millones de personas están en una situación de necesidad desesperada de agua segura y alimentos. Con las carreteras intransitables y los cortes en suministros de agua y electricidad, las personas necesitan asistencia médica de urgencia, medicinas, agua segura y alojamiento. Si no se toman medidas urgentes para proteger servicios esenciales, se prevén consecuencias humanitarias a gran escala.
Con el desplazamiento masivo de personas a otros países, todas las Cruces Rojas de países vecinos (Polonia, Eslovaquia, Rumania, Rusia, Moldavia, Hungría y Croacia), se están volcando en la acogida y asistencia a las personas que llegan, con primeros auxilios, alojamiento temporal, alimentos, agua, artículos de primera necesidad, asistencia sanitaria urgente y apoyo psicosocial, así como tarjetas SIM de teléfono para que las personas puedan mantener el contacto con sus familiares.
La labor de Cruz Roja Española para asegurar el abastecimiento en el ámbito internacional
Más allá de la zona de conflicto activo en estos momentos, Cruz Roja Española trabaja durante todo el año en otras zonas afectadas para lograr el acceso a un suministro que garantice el derecho al agua.
Así, a día de hoy, se encuentra trabajando hasta en 13 proyectos diferentes de Cooperación Internacional para asegurar el acceso a agua potable y segura a más de 1.700.000 personas. Para ello, cuenta con un presupuesto de más de 7 millones de euros en los que participan diferentes organizaciones públicas y privadas.
En Honduras, para mejorar la salud y la higiene de zonas como La Laguna, El Chimizal y caserío El Naranjo, en Erandique, y en el Departamento de Lempira, en Honduras, se ha trabajado en el saneamiento básico y la mejora de viviendas, y en el fortalecimiento de la sociedad civil e instituciones; gracias a ello, más de 2.300 personas ya han mejorado sus recursos, gracias a Cruz Roja Española y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, quienes, también en Honduras, trabajan conjuntamente para el fortalecimiento y la gestión integral de agua en 5 comunidades afectadas por las tormentas Eta e Iota.
María de Laiglesia, Responsable Autonómica de Medio Ambiente, fue delegada de Cooperación Internacional durante la intervención de Cruz Roja Española el pasado año en Honduras. «Cuando sucedieron las inundaciones, hicimos un estudio sobre la accesibilidad al agua que tenían los hondureños y hondureñas.
Una vez conocimos eso, el equipo se dividió en dos: El primero de ellos es el área de infraestructuras: generación y canalizaciones de agua, generación de infraestructuras para letrinas y generación de residuos, y que buscaban dotar de agua-potable o no potable-a la población. Las personas que atendíamos agradecían mucho que les dotáramos de agua potable de manera gratuita, porque estaba acostumbrados a comprar agua en botella. El segundo de ellos es saneamiento masivo y promoción de higiene, que era donde estaba yo. Les dábamos, entre otras cosas, compresas higiénicas, explicábamos la importancia del lavado de manos», nos comenta.
Una compañera de Cruz Roja Hondureña, Delegada de Promoción de Higiene, nos explica en este vídeo el contenido de los kits de promoción de higiene menstrual:
María estuvo un mes en el país hondureño durante la tercera rotación de nuestra entidad estatal. Nos ha contado, además, el propósito que tenían en colaboración con la Cruz Roja Hondureña: «buscábamos que volvieran a tener capacidad de poder ponerse en marcha otra vez».
Os dejamos con este vídeo sobre la toma diaria de muestras de agua, que se hace una vez al día en cada uno de los puntos de distribución de agua potable: