La última Tarde de Cruz Roja del año se convirtió en un acto muy emotivo debido al homenaje que se llevó a cabo a la labor que han desarrollado tres personas durante tantos años dentro de la casa. Y es que en la sede de Pozas 14, Cruz Roja en la Comunidad de Madrid quiso rendir un sentido homenaje a Ana Belén Vallés de Paz que cumple 25 años de antiguedad y a Josefa López Cintas y Eugenio González Cruz, que se han jubilado durante este 2019.
Como señalaba al inicio F.Gabriel Sánchez Parodi, secretario autonómico, «queremos agradecer todos los años de dedicación de estas personas porque han dedicado muchas horas a esta casa, y eso hay que reconocerlo».
Con un emotivo vídeo en el que han colaborado ex-compañeros de las tres personas homenajeadas, se iniciaba el acto.
La primera homenajeada fue Ana Belén Vallés de Paz , que entró como voluntaria en el año 1989 y que desde 1994 es compañera nuestra. Comenzó su labor en la asamblea de Tres cantos pero ahora ejerce su labor como técnica de voluntariado en la asamblea local de Madrid Zona Sur. Ana Belén había preparado unas palabras de agradecimiento en la que destacó que «Con 16 años llamaba a la puerta de la asamblea de Cruz Roja para ser voluntaria tras haber visto la película de Los Tres de la Cruz Roja, porque yo quería ser socorrita». Destacó su paso por el arranque del programa de CRJ de Infancia Hospitalizada y otros puestos de trabajo hasta llegar a la Zona Sur.
Josefa López Cintas entró en Cruz Roja en el año 1976, por lo que lleva 44 años a nuestro lado. Pero tras un camino intermitente, en 2007 se volvió a unir a nuestra familia desempeñando la labor de trabajadora social en la asamblea comarcal de Galapagar. «En esta etapa de jubilación te sientes rara. Echas de menos a Cruz Roja y en poco tiempo agradeceré esta labor siendo voluntaria». Además, de forma espontánea, José Minguez Ortega, presidente de la asamblea de Galapagar quiso dedicarle unas palabras a su ex-compañera «La primera persona que conocí cuando entré en la asamblea fue ella y fue la que, de alguna forma, me introdujo el gusanillo de Cruz Roja».
Para finalizar, Eugenio González Cruz fue la última persona homenajeada por su jubilación. Entro en 1990 como voluntario y en 1994 comenzó su labor contractual con Cruz Roja. Comenzó en Emergencias y su paso le llevó a trabajar como responsable de mantenimiento del área de Servicios Generales. Eugenio sigue como voluntario en Reina Victoria. «Cruz Roja me ha marcado mucho en la vida. Yo siempre he creído en ella y nunca me ha decepcionado».
Además, el acto sirvió para hacer entrega de los nombramientos de compañeros y compañeras en sus cargos, como fue el caso de Alicia Serrano, como coordinadora del proyecto de Intervención Social en el programa de Refugiados. «Quiero agradecer a mis jefes esta oportunidad que me han dado ya que gracias a ellos estoy aquí».
Fernando Miura, fue otro de los nombramientos de la tarde. Su vida ha estado muy ligada siempre a Cruz Roja en el área económica pero un día, decidió dar el paso y afrontar el reto de Coordinar los Servicios Preventivos del área de Socorros y Emergencias. «El cambio es bastante sustancial pero me he sentido muy apoyado en todo momento por todo el equipo de Socorros y me han ayudado mucho a la adaptación».
Por motivos laborales, el presidente de la asamblea de Tres Cantos – Cuenca Alta del Manzanares no pudo estar en el acto de nombramientos de Presidencias y por ello, se le hizo la entrega aprovechando Las Tardes de Cruz Roja. Samuel Fernández García quiso remarcar el agradecimiento a todo el personal laboral voluntario por ayudarlo en todo momento. «Espero estar a la altura y cumplir todas las expectativas en este nuevo reto que se presenta en la asamblea.»
Con respecto a la charla programada para Las Tardes de Cruz Roja, por motivos ajenos a la organización, la ponente prevista no pudo acudir a la cita por motivos personales, siendo reemplazada por una charla de una persona con experiencia internacional dentro de la organización.
