Con el inicio de la pandemia y los confinamientos, hubo que abandonar toda actividad presencial. En la asamblea de Cruz Roja Galapagar-Colmenarejo, tenían claro que era el momento de estar más cerca que nunca de nuestras personas mayores y, por ello, se reforzaron las llamadas telefónicas para detectar posibles necesidades y ofrecer acompañamiento durante el duro confinamiento.
Durante las conversaciones con las personas mayores participantes, manifestaron en reiteradas ocasiones sentimientos de aislamiento y soledad, acrecentados desde la llegada del COVID-19. Aunque muchos de ellos y ellas llevan vidas muy sencillas con pocas interacciones sociales, echan de menos a la familia, a las amistades, las actividades y rutinas que les permitían algún contacto con el exterior.
E
n un principio, intentaron poner en marcha diversas actividades on-line, pero la respuesta fue minoritaria, en muchas ocasiones por desinterés y en otras por falta de medios tecnológicos.
Pensando en aquellas personas, que tienen mucho que decir (o mucha necesidad de ser escuchadas) pero que no encuentran interlocutor, recapacitaron acerca de que la mejor fórmula era recurrir a lo de siempre, a una herramienta de comunicación que pudiese llegar a todas las personas que quisiesen tener voz, sin necesidad de una conexión a internet o una tablet. Así, decidieron poner en marcha…
El «Club de Palabras Viajeras», una iniciativa enmarcada dentro del proyecto “Red Social para personas mayores: Enrédate” cuyo principal objetivo es ayudar a paliar la soledad no deseada de las personas que participan en él.
Lo primero que hizo el equipo de Mayores fue mandar una carta explicando a las personas mayores participantes de su asamblea, en qué consistía el club e informando de que en una semana recibirían una llamada de una persona voluntaria para ver si querían participar.
Se sumaron tímidamente y con cierta curiosidad algunas personas, les apetecía participar y recibir una carta para ver de qué iba la cosa, pero que no se atrevían a escribir escudándose en su nivel cultural o sentir que no tenían grandes cosas que contar.
La primera carta vino de la mano de María Luisa que se animó a compartir unas “Reflexiones en tiempos de COVID”.
En las primeras cartas se incorporaron unas pequeñas líneas de presentación de los miembros del club y poco a poco se animaron a escribir vivencias y reflexiones.
Hoy en las cartas hay poemas de amor, cuentos de la infancia, viajes, historias de vida, momentos felices, homenajes a mascotas, a objetos familiares y con gran valor sentimental…
Todo cabe dentro del club siempre que sea escrito desde el cariño y el respeto
El equipo de voluntarias lo componen Clara, Rosa y María, junto con Marga, técnica de Mayores, son las que desarrollan esta actividad y que con todo el cariño llaman todas las semanas a los más de 40 participantes para comprobar si han recibido la carta, charlar sobre la misma y animarles a que sigan escribiendo. Algunos nos hacen llegar sus cartas por correo ordinario, a otras se la transcribe la voluntaria en esa llamada y los menos la hacen llegar por correo electrónico. Luego se juntan todas las cartas de la semana y se les envía por correo ordinario.
Los hombres y mujeres participantes cuentan al equipo de Mayores, la alegría que supone abrir el buzón y no encontrarse solo facturas o publicidad y que les gusta releerlas por las tardes. Esto les hace sentirse más cerca de otras personas y pensar que sus palabras y sentimientos también llegan a otras personas. Son cartas con la sabiduría de la edad y el cariño del que se siente arropado.
“Nuestra ilusión es continuar ampliando el club y, cuando acabe la pandemia poder hacer un encuentro con todas las personas participantes. Se nos pone la sonrisa en la cara de pensar en cuándo llegue este momento por todo lo que ello implica”, nos comenta Marga, técnica de Mayores de la asamblea de Galapagar-Colmenarejo.
El próximo martes 2 de febrero, Marga Torres, será entrevistada en Cope de la Sierra sobre esta bonita y cercana iniciativa de la asamblea de Galapagar-Colmenarejo y también hará un recorrido por la actividad de Mayores en las asambleas de Villalba y San Lorenzo de El Escorial.
Nota: Enrédate es un proyecto cofinanciado por la Comunidad de Madrid a través de los fondos provenientes de la asignación tributaria del 0,7% del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF).
