Durante la semana pasada, desde el área de Inclusión Social, su director, David de Miguel, junto a la Coordinadora de Inclusión Social, Cristina Gil, y a la Técnica de Gestión del proyecto Centro de Días Infantiles, María Barbero, realizaron la incorporación de más de 50 personas técnicas en el proyecto Centros de día Infantiles, que se llevarán a cabo en centros educativos o espacios cedidos por la Administración Pública de algunas localidades de la Comunidad de Madrid.
Móstoles, Getafe, Torrelaguna, Arroyomolinos, Torrejón de Ardoz y Alcalá de Henares son algunos de los 21 centros que comenzarán su actividad en 2023. Este proyecto está enmarcado en el Plan Corresponsables del Ministerio de Igualdad y a través de la línea de financiación de la Comunidad de Madrid.
El pilar del proyecto es ofrecer un espacio de intervención con familias en situación de vulnerabilidad social, donde se llevará a cabo una intervención integral con niños, niñas y adolescentes de entre 3 a 12 años mediante estrategias educativas y sociales en espacios seguros. También se desarrollará la prevención y detección de situaciones de riesgo intrafamiliares, poniendo en marcha acciones orientadas a minimizar la influencia de los factores de riesgo y potenciar la influencia de los factores de protección del entorno de las familias y trabajando con referentes adultos la responsabilidad familiar para promover la corresponsabilidad y los cuidados familiares positivos.
El pilar del proyecto es ofrecer un espacio de intervención con familias en situación de vulnerabilidad social, donde se llevará a cabo una intervención integral con niños, niñas y adolescentes de entre 3 a 12 años mediante estrategias educativas y sociales en espacios seguros.
Durante los tres primeros días de la semana se acercó al equipo del proyecto el modelo de la entidad en atención a las personas, explicando cada una de sus fases y haciendo hincapié en la importancia de coordinarse con el resto de áreas para que las respuestas sean lo más acordes y ajustadas a la realidad de cada persona.
Una vez incorporadas las familias al proyecto de Centros de Día Infantiles, se profundizó en el modelo de intervención que plantea el proyecto, prestando atención tanto al itinerario a trabajar con los/as referentes familiares, como el itinerario de intervención de los/as niños, niñas y adolescentes.
Por otro lado, se trasladó la importancia de la coordinación, difusión y sensibilización con el entorno, para poder crear redes comunitarias que sean apoyo tanto en la intervención de las familias como en el trabajo comunitario que requiera cada municipio.
Se realizaron varias dinámicas en grupos para trabajar en los contenidos del proyecto y favorecer la cohesión de los equipos de las asambleas que a partir del 9 de enero inician la actividad, apoyándose en las experiencias de aquellas compañeras que vienen de haber trabajado en el proyecto Centros de Día Infantil cofinanciado por el Ayuntamiento de Madrid.
Se abordaron las formaciones que ofrece Cruz Roja en relación a la intervención con familias y con la infancia, además de la formación en IMAP para el registro de todas las respuestas que se ofrezcan a las familias, con el fin de poder llevar un correcto seguimiento de la actividad en las asambleas locales y comarcales.
Durante la última jornada, Esther García, Directora de Recursos Humanos, les informó sobre la historia y organización de la entidad, así como de la misión, visión y principios fundamentales y explicó las oportunidades profesionales y los beneficios sociales que podrían encontrar al trabajar en Cruz Roja. Después, Sheila Lázaro, compañera del Departamento de Comunicación Digital, se encargó de enseñar a los compañeros y compañeras el principal canal de Comunicación Interna, Zona CREO, y les explicó cómo pueden participar en la elaboración de noticias desde las distintas asambleas. Por último, Víctor Quirós, Director de Voluntariado, se centró en la importancia que tiene para la Institución el trabajo como personal voluntario, sobre todo en este proyecto que pretende movilizar a más de 400 personas voluntarias.
Esperamos que el proyecto tenga buena acogida y suponga un aumento de las respuestas dirigidas a las familias en situación de vulnerabilidad social, pudiendo así seguir cada vez más cerca de las personas.