Concienciar sobre el ahorro energético se ha vuelto una tarea obligatoria que nos implica a todos y a todas: la aplicación y defensa de los Objetivos de Desarrollo Sostenible es, sin lugar a dudas, una propuesta estratégica de Cruz Roja en la Comunidad de Madrid. En este sentido, y con especial aplicación de los ODS 7 -energía sostenible y no contaminante- y ODS 13- Acción por el clima- se busca logran dos acciones básicas en nuestra entidad: la aplicación de medidas de consumo energético desde Servicios Generales en nuestras infraestructuras y una campaña de sensibilización en nuestro personal.
Esta última, que será conocida como la campaña Energía Positiva:
Persigue concienciar al personal que hace uso de las instalaciones de Cruz Roja en la Comunidad de Madrid a reducir los consumos y reducir la huella de carbono, además de las medidas que puede tomar la institución para los mismos objetivos.
Medidas de carácter institucional
De esta forma, Ana Belén Martínez, responsable del Área de Mantenimiento, nos ha podido dar algunos tips que todos los que acudimos a los edificios de Cruz Roja de la Comunidad de Madrid podemos aplicar: acordarnos del apagado de los equipos informáticos y luces, así como hacer un uso responsable del papel.
Todas ellas deben ir ligadas a las medidas que a nivel institucional se han desarrollado en los últimos años para conseguir un consumo responsable: ser lo más eficiente posible es una responsabilidad que desde el área se ha llevado a cabo desde hace mucho tiempo. De hecho, desde el momento de la planificación de los nuevos proyectos, ya se incluye la aplicación de los caracteres medioambientales.
Ana Belén nos cuenta que todos los suministros eléctricos de la Comunidad de Madrid consumen kilovatios verdes: provienen de energía de fuentes renovables. Se consigue así, reducir la drástica producción y emisión de huella de CO2 en todos los inmuebles; se ha producido la sustitución de elementos de iluminación tradicionales por tecnología led de bajo consumo. Además, dentro de los edificios, en las zonas de paso- como pasillos, archivos, aparcamientos o aseos- se han instalado luces con detector de presencia o sensores de luz natural que permiten reducir el tiempo de encendido de los equipos. Para evitar un consumo excesivo de agua, se utilizan además perlizadores en los grifos y dobles cisternas.
La responsable del área de mantenimiento nos cuenta que se está desarrollando, además un proyecto piloto en la sede de El Plantío: se trata de un sistema de control de iluminación y climatización centralizado, proporcionado por la empresa LOXONE. Al tratarse de un edificio complicado por su apertura 24 horas, se podrán controlar los encendidos, apagados y termostatos de las distintas estancias, ajustar la iluminación al uso o no de la sala mediante presencia de infrarrojos, así como organizar la producción de climatización del centro, optimizando los consumos eléctricos.
Además, se están implantando instalaciones productoras de energía fotovoltaica, que permitirán el aprovechamiento de la energía solar y una reducción del consumo. Los primeros centros en donde se están desarrollando, con la futura presentación a subvenciones estatales y europeas, con el edifico de El Plantío, Muguet y Valdecanillas.
Además, Ana Belén concluye que «el objetivo del área de mantenimiento es que todos los departamentos vayan de la mano, debe ser una propuesta común. Intentamos dar las herramientas para que se desarrolle un consumo responsable pero desde todas las áreas debe haber esa concienciación. Se trata de una pieza de una parte del todo».
