Cuando te embarcas en una aventura a la que destinas gran parte de tu tiempo para poder realizar una labor de manera altruista, muchas veces nos preguntamos por los factores que hacen que desarrollemos la misma. Los factores que componen lo que se conoce como salario emocional puede ser lo que más valore nuestro voluntariado. Pero, ¿a qué llamamos salario emocional?
El salario emocional es todo aquello que percibe la persona que no tiene relación con el plano económico (ni nómina, ni bonos por objetivos…). Esto comprende:
- El ambiente en la actividad y en la propia asamblea
- El desarrollo de la propia actividad
- La cultura y los valores de Cruz Roja
- La causa: ¿para qué sirve tu trabajo como voluntario o voluntaria en última instancia?
Es en este último punto donde nuestra organización ofrece un valor añadido a las personas voluntarias. La sensación de que el trabajo diario está teniendo un impacto real en la sociedad, ayudando a reducir desigualdades, cambiando vidas de las personas que más lo necesitan, es muy difícil de igualar a otras actividades.
“El salario emocional en Cruz Roja es un factor de motivación decisivo”, asegura Juan compañero del área de Voluntariado de la asamblea de Collado Villalba, “el salario emocional es una de las claves tanto para la atracción y como para la retención de talento de nuestro voluntariado”
En este sentido, compartimos este video de una compañera, Rosina, en el que nos cuenta cómo se siente al terminar de dar una clase de castellano. En las últimas sesiones, Rosina ha tenido una experiencia con un alumno que le ha hecho emocionarse y ver hasta dónde llega y lo que puede cambiar su acción voluntaria en la vida de las personas:
Nota: Integración de Inmigrantes es un proyecto cofinanciado por el 0,7% del IRPF de la Comunidad de Madrid que facilita la inclusión social de personas inmigrantes que se encuentran en situación de vulnerabilidad.
