La teleasistencia, nuestra apuesta de futuro

Gabriel Sánchez Parodi nos descubre la gestión realizada por Cruz roja en esta materia.

Gabriel Sánchez Parodi nos descubre la gestión realizada por Cruz Roja acerca de los últimos acontecimientos de la teleasistencia, dando respuesta a las muchas incógnitas que nos cuestionábamos y que mitigan las inquietudes generadas entorno al último fallo del concurso para personas dependientes de la Comunidad de Madrid. El secretario se sincera aportando tranquilidad, y despejando dudas que nos conducen a buscar una visión optimista acerca del futuro que en Cruz Roja nos planteamos respecto a la teleasistencia.

Recientemente se nos ha informado sobre la exclusión de Cruz Roja respecto a la adjudicación del lote 3 del concurso de teleasistencia para personas dependientes de la Comunidad de Madrid. Un concurso que pensábamos que estaba adjudicado.

Ha sido sin duda una gran sorpresa para toda nuestra Institución, incluida la propia Comunidad de Madrid. Aún no salimos de nuestro asombro. Cuesta volver a la realidad cuando recibes una “noticia” de este tipo. Pero debemos mirar hacia adelante, la situación es diferente a la que había en 2015.

Realmente, ¿qué es lo que ha pasado?

Pues el pasado viernes el Tribunal de la Contratación Administrativa de la Comunidad de Madrid nos comunicó nuestra exclusión del concurso, y por consiguiente se retrotrae el mismo a la fase de adjudicación. Al ser Cruz Roja excluida, la UTE Ferrovial Sanivida sería la adjudicataria, para ello debería reunirse el órgano de contratación de la comunidad para este concurso.

¿Por qué hemos sido excluidos del concurso?

Lo ha motivado un nuevo recurso de la UTE Ferrovial Sanivida, y no recuerdo el número, pero más de cuatro recursos ya llevamos por parte de esta UTE. Desde la publicación de los pliegos, ésta entidad ha recurrido todos los pasos dados por el órgano de contratación de la Comunidad y por Cruz Roja. En este caso, el recurso ante el tribunal de contratación, que no denuncia ni similar, ha sido realizado por entender la UTE que con los recursos designados por Cruz Roja no podríamos llevar a cabo el servicio.

En concreto, ¿a qué se refiere tribunal?

A los costes de personal. En un recurso anterior ante el órgano de contratación de la comunidad, y ante el informe presentado por Cruz Roja, éste nos dio la razón, y confirmó la viabilidad de la oferta de Cruz Roja. Sin embargo, el tribunal de contratación administrativa entiende que no queda demostrada la viabilidad de la misma.

¿Cuál fue la oferta de Cruz Roja?

Para Cruz Roja este concurso era muy importante, no solo porque ya lo estábamos gestionando, sino porque entendíamos que atendíamos a las personas más vulnerables de la Comunidad. El lote que ninguna empresa quiere, el “lote rural”.

Para este lote, Cruz Roja realizó una oferta muy competitiva. Como sabéis perdemos casi todos los concursos porque nuestros costes son mayores que los de la competencia, las empresas de servicios, especialmente los costes de personal. Cruz Roja tiene un convenio de empresa, mientras las empresas ofertan con costes del convenio de dependencia, cuyos salarios son mucho más bajos que los de nuestro convenio. Sin embargo, en este caso, y aprovechando las sinergias de escala: implantación de nuestras sedes, capacidad del centro de coordinación, experiencia de años atrás, ventajas de prestar actualmente el servicio y talento de nuestro personal laboral y voluntario pudimos hacer una oferta muy competitiva.

¿Presentó Cruz Roja una oferta anormal o desproporcionada?

En ningún caso, y así ha quedado demostrado por el informe del órgano de contratación de la Comunidad de Madrid, que está compuesto por funcionariado especializado, además de la intervención delegada de la Comunidad. Además, el mejor ejemplo es que ya prestamos el servicio, aprovechando economías de escala y transversalidad e integralidad en nuestra acción, éstos son nuestros principales valores añadidos ante la Comunidad de Madrid.

Actualmente prestábamos el servicio porque el convenio con la FEMP estaba prorrogado desde sus inicios. En 2015 el tribunal de contratación pública administrativa suspendió el concurso lo que permitió que Cruz Roja recuperara el mismo, porque realmente lo había perdido por muy poca puntuación.

Efectivamente, en 2015 perdimos el concurso del lote que actualmente gestiona Cruz Roja (en estos pliegos solo había dos lotes, actualmente son tres), pero los recursos de Cruz Roja y del resto de empresas contra la valoración técnica del mismo hizo que el tribunal suspendiera totalmente el concurso, llegando a la situación actual. Desde entonces seguimos prestando el servicio. En ese concurso obtuvimos una puntuación de 91,11 puntos, y la UTE SAR Quavitae Telefónica 91´83, por muy poco perdimos el concurso, aunque como decía, luego se anuló.

¿Qué aprendimos en 2015 de la pérdida del concurso?

Pues nos pusimos las pilas, pusimos en marcha un plan de viabilidad que ha permitido que Cruz Roja en la Comunidad de Madrid tenga a día de hoy 10.420 terminales, de los cuáles 6.119 son privados, el esfuerzo en la captación ha sido espectacular. Hemos pasado a ser una de las provincias con mayor número de terminales. Si en 2015 hubiéramos perdido el concurso definitivamente, hoy prácticamente no tendríamos teleasistencia, nos habrían eliminado del mapa. Si finalmente, perdemos el concurso actual nos quedaremos con 7.764 terminales, como ves la situación no tiene nada que ver con el 2015.

¿Por qué afirmas si finalmente perdiéramos el concurso? ¿no hemos sido excluidos?

Porque no lo damos por perdido. Estamos preparando un recurso ante el tribunal contencioso-administrativo ante el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad de Madrid, y creemos que tenemos muchas razones para que pudiera salir adelante, será difícil, pero lo vamos a intentar. Hemos contratado dos gabinetes especializados en esta materia que trabajarán a destajo para que tribunal nos dé la razón.

Y ahora… ¿qué pasará, cuáles serán los próximos pasos a seguir por nuestra parte?

Pues ahora hay que tener tranquilidad, y debemos trabajar para recuperar el concurso, eso en primer lugar. Debemos esperar a que la Comunidad vuelva a adjudicar el lote, y se ponga en contacto con Cruz Roja para informarnos de cómo será el proceso, éste será lento y complejo. El servicio no puede dejar de prestarse en ningún caso.

¿Y qué pasará con el personal que está realizando el servicio?

El convenio del sector asegura la subrogación de todo el personal del servicio, por lo que todo el personal debe estar en calma, nadie perderá su puesto de trabajo, ni cobrará menos de lo que cobra ahora mismo. Cuando se comunique la adjudicación a la otra empresa iniciaremos la correspondiente negociación para la desinstalación de terminales y subrogación del personal. Sin embargo, ahora todos y todas debemos estar con la mayor tranquilidad posible, porque si el contencioso se admite podría incluso suspender cautelarmente la nueva adjudicación, por lo que seguiríamos prestando el servicio. Ante todo debemos ser prudentes.

¿Qué es lo que resaltaría de todo el proceso?

La confianza del personal que presta su servicio en este proyecto. Desde el primer momento en que comenzaron los problemas en 2015, han confiado en nuestra gestión, ahora deben seguir haciéndolo. La profesionalidad que han demostrado ha sido excelente, son grandes profesionales, y no debemos olvidarnos del voluntariado, un apoyo permanente para las personas más vulnerables.

Y para finalizar, ¿cuál es el futuro de la teleasistencia en Cruz Roja?

Por nuestra parte seguiremos trabajando en la captación de privados, a los cuáles ofrecemos servicios avanzados como custodia de llaves y unidad móvil. Además, establecemos alianzas con mancomunidades y Ayuntamientos para la firma de convenios y contratos de las personas no dependientes. Y finalmente apostamos por nuevos proyectos como el Cuídate +, ahora nos podremos centrar en el mismo y comenzar las instalaciones masivas de este servicio que revolucionará lo que conocemos como teleasistencia.