«La calidad humana en la acción ha de ser la ventaja compETITIVA que ofrezcamos a nuestros clientes de Servicios Preventivos”
En ocasiones, se presentan oportunidades en la carrera profesional de una persona en las que es necesario dar un paso adelante y asumir un nuevo reto dentro de la entidad a la que perteneces. Y ese, puede ser el mejor resumen para el nuevo coordinador de los Servicios Preventivos de Cruz Roja Comunidad de Madrid, Fernando Miura.
Fernando lleva ligado a Cruz Roja 23 años, sobre todo, en la parte económico- financiera. Su dilatada experiencia en la casa y su labor en los últimos años en el servicio de preventivos le han llevado a poder coordinar una de las áreas más importantes para Cruz Roja.
Debido a su nuevo puesto, hemos querido hablar con él para que nos contara por qué ha decidido asumir este reto, cuáles son sus deseos en el nuevo puesto y, como hacemos siempre, le hemos pedido que pueda reflexionar sobre su estancia en Cruz Roja y lo que piensa de la entidad.
¿Quién eres y cuál ha sido tu trayectoria en Cruz Roja?
Comencé como voluntario en el año 1995, en la oficina de Collado Villalba. Mi primera toma de contacto fue a petición del que entonces era presidente de la Asamblea Local y, como suele pasar en estos casos, se trataba de “echar un par de horitas a la semana”. Pero como también sucede, Cruz Roja y la actividad que desarrolla te “enganchan” de tal manera que aún sigo por aquí.
El primer proyecto donde me incorporé a colaborar fue el de Socorros y Emergencias ya que, en aquellos momentos, las oficinas locales apenas realizaban otras tareas.
Transcurridos algunos meses, se me pidió que me encargara de organizar la parte administrativa de la Oficina Local así como la puesta en marcha de nuevos proyectos dentro del ámbito de Intervención Social. Recuerdo que el más significativo que logramos implantar fue un piso de emergencia para mujeres víctimas de violencia de género, el primero que tuvo Cruz Roja en la Comunidad de Madrid.
Con posterioridad asumí la responsabilidad del área de formación, sobre todo en lo referido a los cursos destinados a la población en general (principalmente Primeros Auxilios y Salvamento Acuático).
En definitiva, todas estas acciones buscaban consolidar la Oficina Local y acercar su acción a los vecinos del municipio.
Ya en el año 1998 entré como trabajador en la Institución, en concreto en el Departamento de Apoyo a Oficinas Locales. Fue una experiencia apasionante porque te da una visión muy amplia de lo que es la organización.
Comencé con Antonio Cantón, un ‘todoterreno’. La labor que desarrollábamos desde ese Departamento era estar de soporte y ayuda a las Oficinas Locales en un momento en el que carecían de las estructuras que tienen hoy en día. (no existía la figura del Director Técnico y rara era aquella que contaba con la presencia de un administrativo).
La mayor parte de mi trabajo lo desarrollé en las Oficinas de la zona sur de Madrid hecho que me aportó una gran riqueza y una amplia visión de lo que era Cruz Roja, habida cuenta que apenas contaba más que con la realidad que había vivido en mi Oficina de origen.
Allí estuve tres años y, posteriormente, cambié al Departamento Económico Financiero (soy economista de profesión), donde estuve casi 16 años desarrollándome laboralmente en las distintas áreas del mismo.
Finalmente, hace apenas año y medio me pidieron que colaborara en el Departamento de Socorros y Emergencias que es donde estoy actualmente.
Estas dos últimas experiencias laborales han sido muy diferentes, sobre todo, a la hora de organizar el trabajo. En un departamento Económico, aunque tenga un volumen muy elevado de trabajo, es raro que ocurran algún tipo de urgencias, mientras que en Socorros eso es lo habitual. Es un cambio bastante significativo a la hora de trabajar.
A raíz de tu experiencia, ¿Cuándo entraste en el departamento de Socorros y Emergencias y qué labor estabas desempeñando en ese momento?
Me hicieron una petición desde la dirección de Cruz Roja para incorporarme como ‘controller’ del Departamento. Dicha figura viene a ser, en definitiva, quien trata de “ordenar” los procedimientos administrativos y algunas cuestiones complementarias.
En estos departamentos donde se está tan en contacto con las personas es cierto que a veces pueda no resultar prioritario la parte más “burocrática” de la actividad y por eso, a veces es conveniente contrapesarlo con una figura que garantice que también se cumplen todos esos requisitos.
Para mí, al llegar desde un departamento económico, no me supuso gran esfuerzo revisar la parte administrativa y realizar un seguimiento económico porque, precisamente, venía de hacer estas mismas tareas. Pero, a partir de ahí, comenzamos también a actualizar procedimientos y optimizarlos, es decir, que fuimos un paso más allá del mero control presupuestario de los proyectos del área.
Cuando el anterior responsable de Servicios Preventivos (Rafael Soldado) tuvo que abandonar el puesto por circunstancias personales, desde la dirección del Departamento se me propuso la posibilidad de asumir dicha tarea.
La verdad que, al no ser un experto en esta materia, siempre existen las dudas a la hora de aceptar, pero me lo planteé, vi el gran equipo de trabajo con el que contaba y eso es lo hizo decidirme en aceptar, ya que al final, se trata de coordinar a auténticos profesionales, en los que confías plenamente y que son quienes llevan verdaderamente el peso de la actividad.
¿Por qué decides dar ese paso adelante y postularte para el puesto de Coordinador de Servicios Preventivos?
No hay una única razón, sino un cúmulo de ellas. Por un lado, un componente personal de búsqueda de nuevos retos. Llevaba mucho tiempo desarrollando una determinada tarea y sí que me apetecía marcarme un nuevo objetivo.
En un departamento de estas características, donde prima la actividad, te ofrece la posibilidad de innovar, y ese fue uno de los grandes componentes para decantarme.
La necesidad de consolidar un equipo de trabajo a nivel de Departamento y el ofrecimiento de la Directora para que formara parte de la coordinación del mismo es otra de las razones.
Finalmente la última razón es saber que podía contar con grandes profesionales en el equipo de trabajo y que, ellos mismos, fueron los que me animaran a dar ese paso.
«Como reto de futuro, tenemos muchas expectativas de crecimiento. Tenemos que ampliar la cobertura entusiasmando a las personas voluntarias que participan.»
¿Qué importancia crees que tiene esa palabra ‘innovación’ dentro de los Servicios Preventivos?
Como en cualquier ámbito de Cruz Roja, vivimos en un mundo de cambio permanente donde la organización, por su peso e historia, no puede permitirse el lujo de quedarse anquilosada. Es cierto que tenemos una gran ventaja, que es nuestra trayectoria y experiencia. Pero ello debe conjugarse con una continua innovación para estar al día de las actualizaciones que van saliendo.
Concretando, en Servicios Preventivos, esa actualización se debe dar, sobre todo, en los recursos materiales de los que debemos disponer en el ámbito sanitario; a nivel formativo, con los propios voluntarios, en estar al día de las nuevas técnicas que nos hacen ser más competitivos y más punteros dentro de lo que es el mercado de los Servicios Preventivos.
¿Cuál es tu sello personal? ¿Qué huella te gustaría dejar en Servicios Preventivos?
Quien me conoce sabe que una de las cosas que me caracteriza es tratar de ser bastante cercano a la gente y, especialmente, a las personas voluntarias. Somos una organización de voluntariado y eso es fundamental, es nuestra esencia.
Pero si hay algún proyecto que especialmente tenga esta característica son los del área de socorros, debido al elevado número de voluntarios y voluntarias que concentra (sin desmerecer al resto, claro está).
En nuestro proyecto somos 5 trabajadores, 11 en todo el Departamento, para gestionar a más de 2.000 personas voluntarias.
Creo que la cercanía hacia la persona, el poder hacer entender que solo somos un mero soporte a esa tarea voluntaria, me parece muy importante.
Si algo he podido comprobar en el mes que llevo en este nuevo cometido, es que todo engrana perfectamente. Pensé que sería más complicado coordinar a tantas personas, sin embargo, me he dado cuenta de que, por la manera en que están organizados, encaja todo a la perfección.
Hablabas del voluntariado, ¿es el punto fuerte de Servicios Preventivos, el tener este equipo de personas voluntarias?
Sí, es el punto fuerte. Es la esencia misma del proyecto. No se podría concebir los servicios preventivos de otra manera. No solo el voluntariado, nuestra ventaja competitiva es la humanidad de este voluntariado. Dentro del ámbito de servicios preventivos hay muchas empresas, incluso algunas más ‘competitivas’ en cuanto a precio comparadas con nosotros, sin embargo, nos siguen eligiendo. Y ello porque somos competitivos en humanidad, un plus que nosotros añadimos. Esa calidad humana que prestan nuestras personas.
¿Qué es lo más difícil de coordinar en Servicios Preventivos?
Tener una única voz. Cuando muchas personas estamos dentro de un mismo proyecto, cada uno intenta hacerlo lo mejor posible, pero para ello, tenemos que estar perfectamente alineados. Cuando esa alineación no es perfecta, puede surgir alguna diferencia que puede añadir momentos puntuales de roces que, en un servicio que tiene una gran tensión, se puede traducir en situaciones de nerviosismo. Ante esto, es cierto que se necesita de mucho diálogo, mucha mediación.
si hay algún proyecto que especialmente tenga esta característica de ‘equipo de voluntariado’ es el de socorros, que aunque solo sea por número, realmente, son los más importante en ese sentido.
¿Qué supone para Cruz Roja Comunidad de Madrid contar con unos Servicios Preventivos tan buenos?
No se podría resumir en una sola cuestión.
Supone, ante todo, una manera de canalizar la acción voluntaria en algo que es altamente atractivo para el voluntariado. Pero también, nos permite dar respuesta al fin de Cruz Roja, de prevenir y aliviar el sufrimiento humano en cualquier circunstancia.
Y evidentemente, nos aporta una fortaleza en cuanto a la imagen institucional (no hay más que ver los numerosos eventos de primera línea donde Cruz Roja ha estado presente a través de los Servicios Preventivos – Final Champions League, Conciertos de Metallica, Bon Jovi, Elton John, partidos de liga y copa, etc…)
En Servicios Preventivos hay un triángulo de trabajo muy bonito que conecta lo humano con lo profesional entre la persona voluntaria, la socorrista y la facultativa que representan la base del trabajo. ¿Cómo encajan estas tres partes a la hora de desarrollar un servicio preventivo en un evento?
Son tan profesionales que realmente lo que prima en esos momentos no es la condición laboral sino la profesional. Una de las cosas que más me ha llamado la atención es lo bien engranado que está.
Mi primera vez en un servicio, en un concierto, pude comprobar cómo todo iba perfectamente hilado y no se distinguía quien era qué, todos sabían dónde tenían que ir y lo que tenían que hacer.
Volviendo al plano personal, en este mes que llevas en el puesto, ¿qué es lo que más te gusta de tu nuevo rol?
Las expectativas de crecimiento que tenemos. Según llegas el primer día te impresiona mucho lo grande que es el Servicio, vas viendo un poco como funciona y ahí te das cuenta del potencial que tiene. Ese potencial es lo que me apasiona y me mueve a seguir.
¿Y qué es lo más difícil a lo que te enfrentas en esta nueva aventura?
Es un proyecto que toca muchos aspectos, no solo la parte sanitaria sino también, las relaciones con los clientes, la dinamización del voluntariado, los requisitos administrativos. Son muchos aspectos y, el poder controlar o tener seguridad en todos ellos, es complicado. Tienes ese miedo al ‘se me escapará algo’.
Al trabajar tan directamente con las personas los potenciales errores toman otra dimensión y representa una gran responsabilidad. Y es que, en un servicio preventivo, la seguridad del evento viene comprometida por nuestra labor, y ahí, no podemos fallar.
Si tuvieras que resumir un mensaje de cara al futuro en lo que te gustaría conseguir en tu nuevo puesto, ¿cuál sería?
Ampliar nuestro campo de actuación entusiasmando a las personas voluntarias que participan.
En todos estos años que llevas en Cruz Roja, ¿qué has aprendido de esta casa?
Me ha enseñado fundamentalmente que pertenecer a esta institución no es realizar unas tareas concretas, sino que te lleva a poner en juego todas tus capacidades, tanto personales como laborales, para satisfacer ese ideal de humanidad que tiene la organización.
Para ti, ¿qué significa ser de Cruz Roja? ¿Qué nos diferencia de otras entidades?
La humanidad. La calidad humana. No estoy diciendo que otros no la tengan, pero nosotros la llevamos en el ADN. Hace casi 25 años, cuando entré, había muchos menos recursos que ahora, pero yo les comentaba a mis compañeros en el voluntariado que quizás no dispondríamos de los mejores recursos materiales, pero que teníamos ese algo que nos diferenciaba, que es tratar a las personas con cariño, con humanidad.
Es la gran diferencia tanto en Servicios Preventivos como en todas las acciones que realiza Cruz Roja.
¿Cómo le explicarías a alguien que no pertenece a la organización qué es Cruz Roja?
Simplemente le diría “vente y observa”. Nada de lo que te pueda contar te va a servir más que tu propia experiencia de encuentro con las personas.
¿Cuáles crees que son los retos a los que Cruz Roja se enfrenta, como entidad, de cara al futuro?
Vivimos en una sociedad cambiante, en donde lo que se pide a organizaciones como Cruz Roja es cierta flexibilidad para adaptarse a las nuevas situaciones. Debemos seguir dando respuesta a las necesidades de las personas, pero debemos ser mucho más ágiles y eficaces.
