Nuestro compañero Javier Ávila (Técnico de Voluntariado) ha tenido la suerte de conocer Egipto, el país de las esfinges y pirámides, y ha querido contarnos su experiencia allí, además de las razones por las que, sin pensarlo, debemos visitar el norte de África. Os dejamos con la reseña de su viaje:
“Más de 5.000 años de antigüedad. Actualmente cuenta con 78 millones de habitantes. El 95% del territorio es árido. Aquí nació el sistema de escritura más antiguo que se conoce. Es en el único lugar donde se conserva una de las 7 maravillas del mundo antiguo. Nos dejaron el calendario y el papiro…Si, os hablo de Egipto.
Un sueño que se hizo realidad el pasado 24 de mayo. Por fin, y tras varios intentos, logramos pisar tierra egipcia para conocer y descubrir todas las maravillas que nos presenta el país de los faraones.
Mi propósito es transmitiros mi entusiasmo para que, tarde o temprano, podáis saborear lo que a continuación os voy a contar. Aquellos/as que ya habéis estado, sabéis de lo que os hablo.
Madrid-Asuán, 5 horas de vuelo. Temperatura de 41 grados, es de noche. Teníamos la sensación de estar en una sauna, pero no, por fin estaba en suelo Egipcio. A las 02:00 h ponía rumbo al emplazamiento de Abu Simbel para conocer el famoso templo de Ramses II. Las 6 horas en carretera merecieron la pena por ver el amanecer en este conjunto arqueológico. A mi regreso, conocimos el Templo de Philae, impresionante templo dedicado a la diosa Isis ubicado hoy en día en la isla Agilkia.
Llegó el momento de embarcar en “La Sarah” y disfrutar de tres días de navegación por el río Nilo con destino Luxor. Un recorrido mágico donde contemplar los contrastes que presenta el país africano. Durante el recorrido pudimos visitar, entre otros, el templo de Kom Ombo y el dedicado al dios Horus en Edfú.
Ya en Luxor, construida sobre las ruinas de la ciudad de Tebas, pudimos disfrutar de sus dos templos más famosos, el de Luxor y Karnak. Impresionantes. Visitamos el templo funerario dedicado a la reina Hatshepsut, la mujer que más tiempo estuvo en el trono egipcio. Conocimos la necrópolis más famosa del antiguo Egipto, El valle de los Reyes, donde pudimos acceder a 3 de las 65 tumbas que posee. Abstenerse claustrofóbicos. Hicimos parada para ver Los Colosos de Memnón, las gigantescas estatuas del faraón Amenhotep.
Abandonamos Luxor para poner rumbo a El Cairo. 4 días en la mayor ciudad del mundo árabe y la más poblada del continente africano. No podíamos esperar más tiempo para conocer las tres pirámides más famosas del mundo, ubicadas en la meseta de Guiza, Keops, Kefrén y Micerinos. Una autentica maravilla. Muy recomendable ver el espectáculo de luces y sonido que realizan por la noche. Pura magia.
Recorrimos las ruinas de El Cairo antiguo, Menfis y su necrópolis Saqqara, donde se encuentra la pirámide escalonada de Zoser. En el museo de Menfis, Mit Rahina, se encuentra el Coloso de Ramses II y la esfinge de alabastro. Auténticas obras de arte.
De El Cairo moderno recorrimos el barrio Copto, territorio habitado por los cristianos egipcios, la Ciudadela de Saladino, la Mezquita de Alabastro, el abarrotado mercado de Khan el Khalili y el Museo Egipcio, un recinto repleto de autenticas maravillas pero un tanto desfasado.
Algunos lugares menos conocidos como el parque Al-Azhar o la puerta Bab Zuweila y sus minaretes merecen la pena su visita. Y ojo con perderse por la Ciudad de los Muertos. El Cairo es contraste, aroma, té, shisha, caos, regateo, coches, y arte, mucho arte.
Si tenéis la oportunidad, no dejéis escapar la oportunidad de conocer este maravilloso país.”