Desde el área de PRL (Prevención de Riesgos Laborales) en Cruz Roja se han preocupado por la ventilación de los espacios de trabajo, siendo esta un elemento fundamental para prevenir de la expansión de la COVID-19. Por ello, la organización ha instalado dos pantallas de medición de Co2, una en el comedor de la sede del Plantío y otra en el comedor de la sede de Muguet.
Cruz Roja ya había instalado medidores portátiles en los distintos centros de trabajo, pero fue la semana pasada cuando se procedió a instalar estas dos pantallas. El objetivo es que se pueda mantener una correcta calidad del aire interior en el momento en el que las personas se quiten la mascarilla para tomar un café o para comer.
Desde el área de PRL nos recuerdan que el nivel de Co2 del aire exterior normalmente es de unas 400-500 ppm. Un valor entre 500 y 700 ppm en espacios interiores se considera bueno. En el caso de que se llegue a los 800 ppm, sería necesario ventilar el espacio a través de la apertura de ventanas, para renovar el aire.
Especialmente en los espacios donde nos quitamos la mascarilla como son los comedores, debemos extremar las precauciones y mantener una adecuada calidad del aire interior, proceder a ventilar regularmente y mantener la distancia social y respetar los aforos establecidos.
Contar con un medidor de CO2 nos ofrece las siguientes ventajas:
- Ayuda a mantener una buena calidad de aire en los espacios interiores (mide el CO2, la temperatura y la humedad).
- Nos indica cuándo debemos ventilar un espacio interior y así purificar el aire y minimizar el riesgo de contagio.
- Reduce el posible tiempo de exposición a la COVID-19.
- Nos alerta antes de que se produzcan valores excesivos