Con frecuencia nos encontramos con sustancias, utensilios, aparatos o enseres que necesitamos tirar pero que no pueden ir a los cubos tradicionales.
Y es que ciertos residuos deben ser depositados en los llamados puntos limpios, instalaciones de recogida selectiva de residuos domésticos, clasificados para su reciclaje y posterior utilización.
Gracias a estos puntos se evita el vertido incontrolado de productos, algunos de los cuales puede ser muy peligrosos para el medio ambiente y nuestra salud.
La Comunidad de Madrid dispone actualmente de 172 puntos limpios, distribuidos por todo el territorio. Puedes consultarlo aquí: www.madrid.org