Todas las actividades que realizamos a lo largo de nuestra vida tienen repercusión sobre el Medio Ambiente.
Los factores ambientales son los responsables de un tercio de las enfermedades que padecemos. Por ello, es vital para nuestra salud proteger el Medio Ambiente; a cuyo cuidado, podemos contribuir todos y todas, incorporando unas sencillas pautas a nuestras rutinas diarias.
¿Sabías que la climatización representa hasta el 60% del consumo eléctrico total? Para optimizar el consumo de energía podemos:
Antes de optar por medidas energéticas puedes recurrir a otras que no implican consumo. Por ejemplo, baja toldos y persianas para evitar que en verano las estancias se caldeen en exceso.
Instala termostatos: Ten en cuenta que cada grado que suba o baje la temperatura implica un incremento de 8% del consumo energético. En verano, la temperatura saludable es de 22º a 25ºC.
En la medida de lo posible, prioriza el ventilar frente al aire acondicionado; esta media supone el ahorro de un 90% del consumo energético.
Comprueba los cerramientos: Una vivienda bien aislada puede consumir hasta un 40% menos de energía.
Haz un uso responsable de los recursos: no es preciso climatizar aquellas estancias que no estamos utilizando.