Talleres, actividades y seguimiento virtual a las familias: así se ha adaptado al confinamiento el Centro de Día Infantil

El pasado 11 de marzo, a raíz del comienzo de la emergencia sanitaria, empezó el confinamiento para mucha gente, y el Gobierno tomó una decisión que iba a a tener un impacto muy importante en la vida de mucha gente y en especial para los niños y niñas: el Cierre de los Colegios.

En el comunicado del Cierre de los Colegios, se añadía la “suspensión de actividades educativas complementarias” entre las que está el proyecto del Centro de Día Infantil. Es decir, la ausencia de actividad y seguimiento de más de 1.000 niños/as y 740 familias que atendemos todas las tardes de lunes a viernes de 16 a 20 horas.

Con lo cual, los menores pasaron de un día para otro de estar hasta 12 horas diarias fuera de sus casas, con el cuidado y atención de profesionales, con sus amigos, sus compañeros… a no poder salir en absoluto de ellas. Si ya de por sí, los adultos nos hemos encontrado ante una situación de inestabilidad, miedo, incertidumbre… imaginémonos lo que ha podido ser para los niños/as a los que se les da muchas menos explicaciones de lo que sucede, del por qué de estas extrañas vacaciones en las que en realidad no puedo hacer las cosas que se supone que conllevan una vacaciones.

También para sus familias en general, colectivos en su mayor parte vulnerables, con dificultades económicas, de empleo, de convivencia… con una mochila que les hace un poco más vulnerables que otras familias en esta situación.

Adaptación a los cambios

El proyecto de Centro de Día Infantil continua intentando mantener la labor educativa y de seguimiento social de los niños/as y sus familias, mientras avanzan estas extrañas vacaciones.

Por eso, desde el primer momento los compañeros y compañeras de Cruz Roja desde el proyecto de Centro de Día Infantil, y en coordinación con el área de Infancia del Ayuntamiento de Madrid, han intentado transformar su actividad ante este nuevo escenario laboral de teletrabajo. Para ello, han adaptado la actividad de la siguiente manera:

• Las entrevistas presenciales con las familias, las han transformado en llamadas telefónicas.
• Los talleres grupales con materiales calculados, en talleres más individuales y con material improvisado.
• Las actividades de educación en valores, en retos de colaboración en las tareas domésticas.
• Las consultas de la hora de apoyo escolar, en una especie de «profes a distancia».
• Las asambleas, en videollamadas grupales en las que poder verse y contarse las cosas que hacen…

De este modo, cada uno con su imaginación y con los medios tecnológicos que las familias disponen, se han ido adaptando a cada situación y siguen intentando estar cerca de los niños y las niñas.

Con cerca de 1.300 llamadas semanales a las familias, realizando de manera telemática alrededor de 2.600 acciones lúdicas y de apoyo escolar, con más de 300 contactos a la semana con SS.SS, con compañeras de otros proyectos de Cruz Roja y con otros agentes y entidades sociales; a través del teléfono, de los ordenadores portátiles y del ingenio.

También cerca de las familias, resolviendo dudas sanitarias según marcan las pautas básicas del área de Salud de Cruz Roja, tratando de recoger las necesidades más básicas (de alimento, higiene, medicinas…) y sirviendo de vehículo a veces con Servicios Sociales y otras veces con las Zonas de Cruz Roja en la A. Local de Madrid, para darles cobertura.

También simplemente estando, para muchas de esas familias, al otro lado del teléfono para desahogarse, para conversar, para ayudarles a establecer rutinas básicas para sus hijos y a priorizar dónde o cómo debemos exigir a los niños/as en esta situación nueva para todos.

¡Enhorabuena y gracias por vuestro gran trabajo compañeras y compañeros!