Hace exactamente un año de la nevada histórica que llenó la Comunidad de Madrid de copiosas nevadas e intenso frío, la borrasca Filomena. Unos días que nuestros equipos y todas las personas de Cruz Roja de la Comunidad de Madrid recordarán siempre, por la gran disposición que mostró la entidad: desde el dispositivo especial en la Cañada Real, la actuación de Socorros y Emergencias, Intervención Social o Servicios Generales. Por eso mismo, hemos querido rendir homenaje al aniversario de Filomena, para recordar las actuaciones de Cruz Roja de la Comunidad de Madrid y cómo lo vivieron sus protagonistas, a través de los diferentes artículos que publicamos en su momento.
Preparados para actuar ante el temporal
En cuanto comenzó el temporal, Cruz Roja se reunió con la Comunidad de Madrid y las organizaciones de apoyo en emergencias integrantes del Plan Territorial de Protección Civil de la Comunidad de Madrid. Ahí se decidió el plan de actuación ante el paso de Filomena. Además, se activó el Nivel 1 del Plan de Protección Civil ante Inclemencias invernales.
Entre otros recursos, el área de Socorros y Emergencias de Cruz Roja de la Comunidad de Madrid puso a disposición de los ciudadanos y las ciudadanas los siste vehículos adaptados, entre los que se encontraba una ambulancia 4×4. Esta área contó con la participación de 50 voluntarios y voluntarias, en un dispositivo especial para llevar alimentos, mantas y bebidas calientes a conductores atrapados y a albergues incomunicados por la nieve. En el siguiente vídeo, Javier Guede, coordinador de los equipos TSU y ERIEs, nos actualizaba sobre las intervenciones producidas durante la jornada:
Durante esos días, se ha activado además una agenda de contactos con 160 participantes inscritos en el proyecto de atención integral de personas sin hogar, para conocer su situación, detectar posibles necesidades y cubrirlas en base a las capacidades existentes.
En este sentido, Jorge Martínez, referente del ERIE de Búsqueda y Salvamento Terrestre, a quien pudimos entrevistar, estuvo en alerta antes, durante y después del temporal Filomena, atendiendo a los avisos de emergencia y salvamento que se hicieron en los diferentes puntos de la región. Pudimos conocer sus reflexiones, emociones y sentimientos. Puedes leer la entrevista completa en este enlace.
En el caso del área de intervención social, el equipo atendió a un total de 62 personas en situación de calle a través de los equipos de voluntariado de las Asambleas de Corredor Norte, Corredor Sur y Alcorcón. A todas las personas se les informó de los diferentes recursos habitaciones, se hizo entrega de productos de higiene, ropa de abrigo, sacos de dormir, etc.
En este campo se activaron, además, los albergues de atención a personas sin hogar en: Atocha, destinado a familias en exclusión residencial; Usera, destinado a hombres sin hogar; los dispositivos habituales de atención a personas sin hogar, en colaboración con el Ayuntamiento de Madrid y Ayuntamiento de Torrejón de Ardoz; CAT, que se articuló para mantenerlo abierto 24 horas para poder proteger a las personas que residen en el centro y por último, el albergue de Torrejón de Ardoz, en coordinación con el ayuntamiento y que amplió durante dos semanas su cobertura a 24 horas. También se activaron las agendas de contacto: Agenda Filomena y Agenda extrema vulnerabilidad y pobreza energética.
En este sentido, entrevistamos a José Miguel García «Oli», coordinador del programa de centros para inmigrantes y Ayuda Humanitaria, en donde nos pudo contar en qué consistió los recursos que le ha dado la organización a las personas sin hogar durante el temporal, así como la coordinación y el trabajo de los equipos de Cruz Roja. Nos reconoció que la «clave fue la rapidez para dar amplitud de respuesta en la emergencia social». Puedes leer la entrevista en este enlace.
Indispensable fue también la ayuda del departamento de Servicios Generales, quienes trabajaron con urgencia para asegurar que todas las infraestructuras y servicios necesarios funcionasen correctamente en las diferentes sedes y asambleas de Cruz Roja de la Comunidad de Madrid. Movilizaron dos vehículos con tracción a las cuatro ruedas y neumáticos de invierno, para permitir el acceso a todos los puntos de la Comunidad, poniéndose en marcha dos unidades de mantenimiento; llevaron a cabo labores de mantenimiento necesarias en equipos de aire acondicionado; desde Logística y Flota, se realizó el envío de recomendaciones de uso y utilización de los vehículos, equipos y enseres a llevar en los viajes, así como la necesidad de tener cadenas en los desplazamientos.
Historias con Alma
Con la llegada de la calma después de la gran tormenta, pudimos conocer algunas de las grandes historias que nos trajo Filomena. Ejemplo de ello fueron nuestros participantes del CAT San Blas, que demostraron su iniciativa, solidaridad y humanidad en la espectacular nevada.
Para muchas personas, salir a comprar, ir a por medicinas o hacer cualquier recado, se convirtieron en actividades de riesgo durante unos días. Y por mucho que los operarios trabajaran día a día en la limpieza de las calles, no se daba a basto para liberar todos los accesos a los domicilios. Ante este panorama, esta iniciativa ha sido más bienvenida que nunca. Todo comenzó cuando un vecino, que estaba despejando en solitario un caminito en la zona, le pidió a uno de los chavales si le podía ayudar. A este chico, Mohammed, enseguida se le unieron cerca de 20 compañeros y compañeras que, viendo la situación de las calles y las dificultades que tenían los vecinos y vecinas, decidieron seguir quitando la nieve y haciendo caminos por una buena parte del barrio.
También conocimos la emotiva carta de Cristina a David e Iván, voluntarios de Cruz Roja Alcorcón, que trasladaron a su padre durante el temporal. Cristina, vecina de la localidad de Móstoles, que llamó al 112 pidiendo un traslado de emergencia al hospital para su padre, que precisaba de atención médica tras la llegada de la borrasca Filomena. Tras encontrarse varias negativas por las inclemencias, Cristina casi había perdido la esperanza de poder trasladarle ese día, por lo que salió de su casa en dirección a casa de su padre para ver qué podía hacer ella sola. Cuando para su sorpresa, al llegar a casa de su padre, se encontró con David Crespo e Iván Navas, voluntarios del equipo de Transporte Sanitario Urgente (TSU) de Cruz Roja Alcorcón, que ya estaban en su domicilio, preparando al paciente para hacer el traslado, que pudo hacerse felizmente a pesar de las consecuencias del temporal.
Cristina se mostró muy emocionada por la ayuda recibida y el trato de los voluntarios de Cruz Roja hacia su padre y, por eso, días más tarde, les escribió esta emotiva carta de agradecimiento:
Puedes conocer a fondo la historia en este enlace.