El 8 de mayo de cada año se celebra el día mundial de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, en conmemoración del nacimiento de su fundador, Henry Dunant, y con el objetivo de reconocer la labor generosa de voluntarios y empleados que, a lo largo del mundo, todos los días salvan vidas y ayudan a quien más lo necesita, manteniendo siempre el sentido de humanidad, la convicción de imparcialidad, la posición de neutralidad, la actitud de independencia, el modelo de voluntariado, el criterio de unidad, y la mirada de universalidad. Siete principios que a lo largo de 157 años han construido una organización dedicada a defender la dignidad de las personas.
Este año, en la Asamblea de Pozuelo hemos querido repetir un detalle sencillo pero de gran mensaje, para agradecer el esfuerzo de todos y entusiasmarnos para continuar sin cansarse. A lo largo del lunes 9 de mayo, todas las personas que por diferentes motivos hayan pasado por nuestra sede habrán sido recibidos con unas deliciosas galletas que representan el abrazo de todos los voluntarios y empleados que hacen de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja una extraordinaria institución humanitaria, de carácter voluntario y de interés público, dedicada a aliviar el dolor humano en cada situación particular que atiende.
Un pequeño detalle cargado de gran entusiasmo.