Acaba agosto y en la asamblea comarcal de Cruz Roja en Collado Villalba hacen balance de la Campaña de Prevención de Incendios forestales, una actividad iniciada en agosto desde el Plan de Medio Ambiente que tiene como objetivo sensibilizar a la población en conductas respetuosas con el medio ambiente y la prevención de incendios.
La actividad se ha desarrollado con normalidad 2 fines de semanas del mes de agosto de viernes a domingo por la mañana en el espacio natural conocido como La Barranca, que se encuentra dentro del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares y clasificado como Reserva Natural Integral. Una de las rutas más atractivas y familiares que puedes realizar en este entorno son los Senderos por el Valle de la Barranca (pincha para ver más información).
Durante estos fines de semana han participado 14 voluntarios y voluntarias que han llegado a sensibilizar a más de 1.700 personas (897 hombres y 831 mujeres) que se acercaron al Valle de la Barranca para pasar el día o realizar alguno de los muchos senderos que discurren por la zona.
La actividad tiene como objetivo la educación ambiental y sensibilización en el ámbito de la prevención de los incendios forestales, mediante jornadas informativas a las personas visitantes, destacando temáticas de buenas prácticas como:
- Evita abandonar residuos orgánicos.
- Jamás tires vidrios, plásticos o papeles.
- Evita producir molestias en el medio natural.
- Evita la afección sobre la flora local.
- En caso de que detectes algún incendio avisa a los servicios de emergencias (112).
La prevención debe estar presente e integrada en las actividades de cualquier persona que se acerca a la naturaleza, para ello, es fundamental el comportamiento y la actitud de todas las personas. Los problemas ambientales a los que nos enfrentamos hoy en día demandan más conocimiento y difusión.
Así lo explica la Técnica Referente de Medio Ambiente de la asamblea, Laura García:
“Podríamos decir que necesitamos, primero, una mejor comprensión del funcionamiento de los ecosistemas naturales, incrementando así nuestra capacidad para diagnosticar su estado actual y su “sensibilidad” ante los cambios inducidos en ellos por la actividad humana.
Segundo y a nivel de progreso técnico y económico necesitamos herramientas tecnológicas que permitan avances sustanciales en la ecoeficiencia de los procesos sociales y productivos en los que se ve involucrada la naturaleza (hacer más con menos, podríamos resumir), así como en la búsqueda de sustitutos para los procesos que implican un mayor impacto en nuestro entorno.
Por último, medios para facilitar la conexión entre la solución y el problema, mejorando nuestra capacidad de “comunicar” los problemas ambientales, informando mejor sobre “buenas prácticas” y alternativas, así como sobre la situación general del medio ambiente.
Este mes de septiembre realizaremos dos nuevas intervenciones siguiendo nuestro plan establecido y aportando de manera inequívoca al cumplimiento de las metas del Objetivo 15 #ods15: Gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras, detener la pérdida de biodiversidad y abordando las amenazas a las que se enfrentan las especies y los ecosistemas terrestres de nuestro ámbito.
